Los alicientes históricos de este circuito al norte de Adís Abeba son monumentales.
Después de unos días en la caótica Adís Abeba, se toma rumbo norte hasta Bahir Dar, con palmeras, donde se pasa un día. Al día siguiente se va al lago Tana para visitar monasterios centenarios en los islotes lacustres. Luego se pasea por las ruinas de castillos del s. XVII en Gondar .Unos 100 km al norte se hallan las montañas Simien, uno de los parques nacionales más impresionantes de Etiopía.
Se prosigue hasta Aksum, con tumbas precristianas y espléndidas estelas. Después de un par de días se va a las ruinas de 3000 años de antigüedad de la primera capital de Etiopía, Yeha, y al monasterio de Debre Damo, en lo alto de un acantilado. Luego se toma rumbo sur para admirar las magníficas iglesias rupestres de Tigray. Un poco más allá está Mekele, punto de partida hacia la extensión del Danakil. Tras regresar a Mekele, se va a Lalibela, cuyas iglesias rupestres y miríada de túneles han congelado en piedra la Etiopía de los ss. XII y XIII. Al cabo de tres días, se regresa a Adís Abeba.