La colina del Quirinal alberga la extraordinaria Fontana di Trevi y el imponente Palazzo del Quirinale, así como importantes iglesias de los dos maestros del barroco romano, Gian Lorenzo Bernini y Francesco Borromini. La zona también acoge numerosas galerías de arte. Presidiéndolo todo se alza la sobria autoridad del Palazzo del Quirinale, que ofrece vistas maravillosas al anochecer.

Lo mejor en un día

Se empieza en el majestuoso Palazzo del Quirinale y se continúa con una visita a la vasta colección privada de la Galleria Colonna. Tras echar una moneda en la Fontana di Trevi, para asegurarse el retorno a Roma, se va a almorzar en el Colline Emiliane.

Después de comer, aguardan la pompa barroca y descubrimientos renacentistas del Palazzo Barberini, una excelente galería de arte en uno de los grandes palazzi (mansiones) de Roma. Luego, se visita el lugar más extraño de la ciudad: las capillas subterráneas hechas de huesos humanos del Convento dei Cappuccini. Una bebida en el Pepy’s Bar ayudará a olvidar el ambiente macabro.

El día termina con un festín toscano en la Vineria Il Chianti seguido de whisky y música en el Gregory’s Jazz Club.