Cómo moverte por Islandia

Texto por
Alexander Howard, autor de Lonely Planet
Coche cruzando un puente © HRAUN / Getty Images.

Paisajes inmensos se extienden entre volcanes y montañas con coronas de hielo. Carreteras costeras serpentean por los fiordos, pasando por pueblos de pescadores, iglesias aisladas y alguna oveja que bala junto al asfalto. Los campos de Islandia son tan variados como majestuosos.

Este es un país relativamente pequeño –poco más de 100 000 km2–, pero por el que puede ser complicado desplazarse. Los paisajes volcánicos y los fiordos conforman un terreno difícil, y los caprichosos patrones climáticos pueden arruinar cualquier viaje por muy organizado que esté. Por suerte, algunos de los lugares de mayor interés quedan a pocos kilómetros de Reikiavik, así que no hace falta ir muy lejos para ver algunas de las principales atracciones turísticas de Islandia.


Pero hay todo un país por explorar. Desde alquilar un automóvil a tomar el autobús, he aquí cómo moverse por Islandia.

 

Automóvil y autocaravana

Carretera de circunvalación © Peter Duchek / 500px

La carretera de circunvalación es la más emocionante del país © Peter Duchek / 500px.

 

Explorar Islandia en un vehículo propio da libertad para viajar al ritmo que se quiera, y la red de carreteras es en líneas generales aceptable, con poco tráfico. La carretera 1 (más conocida como carretera de circunvalación) rodea el país, y otras vías asfaltadas o de grava zigzaguean por el resto de la isla. Durante el verano basta un turismo de tracción normal para viajar por las principales carreteras de Islandia. A menos que se conduzca un todoterreno, hay que evitar el altiplano y cualquier vía de circulación que vaya precedida de una F (como la F88).

Tomar las paisajísticas carreteras de la costa es una manera especialmente agradable de ver los campos, aunque conducir por los fiordos añade a veces 1 h o más al viaje. Muchas carreteras de montaña cierran en invierno, así que conviene planificar con tiempo. La web de la Icelandic Road and Coastal Administration da información actualizada sobre dichos cierres.
Los conductores de EE UU, España y la mayoría de los países europeos deben tener un permiso de conducir en vigor expedido en el país de origen. También se acepta el permiso internacional.


Consejos para alquilar un automóvil. Es bastante sencillo, aunque hay que tener en cuenta los precios, el seguro y qué hacer en caso de avería.

En Islandia operan agencias internacionales como Europcar, Budget y Avis. Sin embargo, las compañías locales, como Blue Car Rental, A Car Rental y Go Car Rental, pueden proporcionar servicios adicionales como acceso a internet o seguro incluido a un mejor precio. En Islandia, las tarifas de alquiler suelen ser más elevadas que en otros países, y merece la pena reservar con antelación para abaratarlas.

 

Carretera 1, Islandia © Heather Carswell / Lonely Planet.

La carretera 1 pasa por el volcán Eyjafjallajökull © Heather Carswell / Lonely Planet.

 

Dependiendo de adónde se vaya o de cuándo se viaje, no es mala idea suscribir un seguro adicional que proteja contra daños por grava, arena o ceniza. La mayoría de las pólizas excluye este tipo de daños de la cobertura habitual por daños en el vehículo, de modo que si se va a viajar en otoño o primavera vale la pena contratarla. Todo aquel que tenga previsto conducir por carreteras “F” debería además asegurarse contra la grava.

Es fundamental inspeccionar cuidadosamente el vehículo antes de firmar para la entrega de llaves. Las carreteras de grava causan habitualmente arañazos y abolladuras. Hay que informar a la agencia y sacar fotos de cualquier desperfecto por pequeño que sea. La agencia dirá qué tipo de carburante debe usarse (diésel o gasolina), aunque suele haber una pegatina en la tapa del depósito por si alguien se despista.


Consejos para alquilar una autocaravana. Por combinar alojamiento y transporte en una sola partida de gasto, las autocaravana son muy populares para viajar por Islandia. Además, a diferencia de casi todos los demás alojamientos, los campings de la isla no requieren reserva previa, así que una autocaravana da más libertad.

El verano es la mejor época. En invierno, la mayoría de las infraestructuras que dan servicio a las autocaravanas, como campings y baños públicos, echan el cierre. Además, el tiempo invernal puede arruinar el mejor planificado de los viajes.

La mayoría de las agencias de alquiler ofrece autocaravanas, pero es preferible elegir compañías nacionales. En los últimos años han surgido empresas islandesas de alquiler que ofrecen desde colosos de tamaño familiar hasta modelos todoterreno acondicionados para las carreteras de montaña. Muchas agencias añaden GPS o conexión a internet, cocina o equipo de pesca. Dos de las más conocidas son CampEasy y Go Campers.


Autocaravana, Islandia © FEBRUARY / Getty Images

Alquiler una autocaravana da la máxima flexibilidad para viajar por Islandia © FEBRUARY / Getty Images.

 

Las gasolineras están instaladas a intervalos fijos en las carreteras principales; pero, si se viaja a zonas apartadas como el altiplano, hay que asegurarse de llevar combustible suficiente. La mayoría de las gasolineras pequeñas no tiene personal de servicio y los surtidores son automáticos, lo que obliga a pagar con tarjeta y PIN. Si no se tiene tarjeta, se puede comprar una de prepago en cualquier gasolinera N1 para usarla en estos surtidores. Algunas entidades emisoras de tarjetas de crédito de EE UU facilitan un PIN.

La familiaridad con el gato y la colocación de la rueda de repuesto sacan de apuros cuando se pincha un neumático en medio de una carretera larga y vacía. Si le ocurre algo al vehículo que se ha alquilado, hay que llamar a la agencia para pedir ayuda.

 

Autobús © Bahadir Yeniceri / Shutterstock.

Los autobuses recorren toda Irlanda y son una manera económica de moverse por el país sin coche © Bahadir Yeniceri / Shutterstock.

 

Autobús

La red de autobuses de Islandia es una amalgama de líneas de autobuses públicos y autocares turísticos; estos últimos funcionan solo en verano (generalmente en julio y agosto). A pesar de esta limitación, la red de permite desplazarse por Islandia sin coche, lo que supone un ahorro para los viajeros con presupuesto ajustado.

 

Autobuses públicos

Las compañías islandesas con servicio público de autobuses son Stræto, que casi circunvala el país por la carretera 1; Svaust, en el este, que conecta con la línea de Straeto por la carretera de circunvalación en Egilsstaðir y Höfn; y las líneas locales del oeste. Esta red enlaza los principales núcleos de población de la costa y también las zonas de senderismo más populares.

Los autobuses públicos funcionan todo el año, pero en muchas líneas se reducen los servicios en los meses de invierno y en algunas se suspenden por completo. Además, el tiempo imprevisible puede dar al traste con planes y rutas, así que hay que contar con posibles retrasos.

 

Autobuses turísticos regulares

Durante el verano, los autobuses de agencias como Reykjavik Excursions, Volcano Huts y Iceland By Bus trasladan a los visitantes por los lugares de interés del oeste de Islandia. Estas líneas pueden servir como un medio de transporte más entre las atracciones turísticas, o simplemente para ir de un punto a otro. Muchos vehículos están equipados con GPS, lo que permite tenerlos localizados en todo momento, y algunos ofrecen también wifi a bordo.

 

Avión, Islandia © photo by Pam Susemiehl / Getty Images.

Volar es una manera rápida, pero cara, de viajar por Islandia © photo by Pam Susemiehl / Getty Images.

 

Avión

Los vuelos internos son una manera rápida, pero cara, de desplazarse por el país. Los aeropuertos principales con vuelos nacionales están en Reikiavik (ojo: no en Keflavik, donde solo operan vuelos internacionales), Akureyri y Egilsstaðir.
Por la complicada orografía del país, los islandeses han adoptado los viajes por avión como un medio de transporte casi equiparable al autobús o el tren, sobre todo en invierno. La lista completa de aeropuertos, incluidos los lugares de interés cercanos y la información sobre aparcamientos, puede consultarse en la empresa pública de la navegación aérea, Isavia.

 

Bicicleta

Las carreteras costeras son por lo general llanas y asfaltadas, y montar en bicicleta es una manera excelente de ver esta parte del país. Pero hay que ir prevenido: el tiempo puede ser infernal, con vientos que parecen soplar siempre en contra, frío y lluvias torrenciales, y tormentas de arena y nieve, incluso en verano.

La carretera de circunvalación carece de arcenes en la mayor parte de su trazado, así que con frecuencia habrá que pedalear en medio del tráfico (que tampoco es muy denso en Islandia). Los ciclistas pueden circular por casi toda ella, excepto por dos tramos del oeste: el túnel del Hvalfjörður y la periferia de Reikiavik, donde la carretera se convierte en autopista. La mayoría de los ciclistas recorren la carretera de circunvalación en un par de semanas.

En Reikiavik se consiguen fácilmente parches y ruedas de repuesto, pero fuera de la ciudad resulta casi imposible. Es importante comprarlos antes de emprender viaje.
La mayoría de los ciclistas lleva sus propias bicicletas, pero Reykjavik Bike Tours las alquila de montaña que sirven también para carretera y ciudad.

 

Bicicleta, Islandia © Alex Walker / Getty Images

A pesar de las condiciones meteorológica, la bicicleta es un medio de transporte muy placentero para recorrer determinadas zonas de Islandia © Alex Walker / Getty Images.

 

Barco

Por lo general, los visitantes utilizan el barco para desplazarse a los lugares de interés turístico: salen para pasar un día en el mar y regresan al mismo puerto de donde zarparon. Sin embargo, hay algunas zonas donde el ferri se convierte en el medio de transporte principal. La mayoría de los ferris transporta también vehículos.

 

Ferri a Viðey

Este ferri hace travesías regulares desde Reikiavik a la deshabitada isla de Viðey, con numerosos senderos, colonias de aves marinas y edificios históricos. Los billetes se compran en las terminales de ferris de Skarfabakki y en el puerto viejo (solo verano). En la isla de Viðey están prohibidos los coches.

 

Ferri a Vestmannaeyjar

Conecta el suroeste de Islandia con un archipiélago de acantilados abruptos, aves y el pintoresco pueblo de Heimaey, cobijado en una colada lávica que casi lo arrasó en la década de 1970. Para reservar billetes, véase herjolfur.is.

 

Ferri a Brjánslækur

Este ferri con servicio todo el año ahorra no poco tiempo al viajar a los fiordos occidentales desde la península de Snæfellsnes. Con salida desde Stykkisholmur en la península, hace escala en la isla de Flatey antes de atracar en Brjánslækur.

 

Ferri a Grímsey

Con transporte de pasajeros al círculo polar ártico para ver colonias de frailecillos, pintorescos acantilados y formaciones basálticas, el ferri de Dalvík a Grímsey da 2-5 h de margen para explorar la isla antes de regresar. O bien se puede pernoctar en alguna de las dos pensiones de la isla o en el camping. Reserva de billetes en samskip.is.

 

Ferri a Hrísey

Con fácil acceso desde tierra firme, Hrísey es una isla tranquila para una escapada (menos de 200 hab.), con vistas espectaculares del Eyjafjörður, en el centro-norte de Islandia. Con siete salidas diarias desde Árskógssandur, el ferri realiza la travesía en unos 15 min. Véanse los horarios en hrisey.is.

  

Ferry, Islandia © Alexander Howard / Lonely Planet

Los ferris son una manera habitual de desplazarse por la costa © Alexander Howard / Lonely Planet.

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