Bienvenidos a Mauritania
Al atravesar los vastos paisajes abrasados de Mauritania, uno se da cuenta de que no tiene mucho que ver con el mundo posapocalíptico de Mad Max. En su lugar, una figura solitaria con turbante y unas cabras cuenta la historia de la supervivencia ante fuerzas geológicas milenarias.
Con una de las densidades de población más bajas del mundo, Mauritania presenta una combinación cultural sorprendente que forma parte de su atractivo, con aproximadamente la mitad de sus habitantes de descendencia bereber, y la otra compuesta por negros africanos.
Su paisaje es de los más bellos del continente. Millones de aves migratorias hibernan en el Parque Nacional Banc d’Arguin, y en la expansiva capital, Nuakchot, la modernidad echa raíces en el desierto.
La región de Adrar ofrece dunas épicas, mesetas espectaculares y verdes oasis, además del monolito más grande de África. Tagânt cuenta con atractivos similares y ambas ocultan antiguas poblaciones caravaneras: Chinguetti, Ouadâne y Oualâta. Sin embargo, el interior del país actualmente no es seguro para los viajeros.