Desde la fuerza indómita del Gran Cañón hasta los carnavales caribeños, pasando por los humedales argentinos o las montañas andinas, América ofrece vivencias que transforman la manera de viajar. Estas experiencias —ya sea buscar jaguares en Iberá, remar por los rápidos del Colorado, cabalgar junto a chagras en Ecuador o colaborar en proyectos científicos en plena Amazonía— conectan con la naturaleza, la cultura y las comunidades locales de un modo profundo e inolvidable.
1. Buscar jaguares en los humedales de Iberá, (Argentina)

Jaguar en Iberá, Argentina. ©imageBROKER.com/Shutterstock
En los esteros del Iberá, al norte de Argentina, los jaguares salvajes han regresado gracias a un exitoso programa de reintroducción. Este vasto humedal invita a explorarlo en barca, a caballo o en canoa, con la posibilidad de observar capibaras, venados y aves… y la esperanza de avistar al esquivo felino. Una experiencia única en uno de los ecosistemas más salvajes y biodiversos del país.
2. Asiste a un combate de Cholitas: Bolivia

Cholitas con vestidos tradicionales. ©Diego Grandi/Shutterstock
Cada domingo en El Alto, las cholitas voladoras conquistan el cuadrilátero mezclando lucha libre, acrobacia y teatro. Con sus polleras y bombines, estas mujeres indígenas desafían el machismo, reivindican su identidad y celebran su empoderamiento. Su espectáculo es símbolo de resistencia, orgullo y transformación social en una de las comunidades más resilientes de Bolivia.
3. ‘Rafting’ por los rápidos del río Colorado en el Gran Cañón (EE UU)

Rafting en el río Colorado. ©Jim Mallouk/Getty Images
Descender el río Colorado en rafting por el Gran Cañón es una experiencia transformadora. Entre rápidos legendarios, noches bajo un cielo estrellado y una desconexión total del mundo moderno, el viaje combina aventura intensa, introspección y una conexión única con la naturaleza. Una vivencia exigente que deja huella para toda la vida.
4. A caballo por las montañas de los Andes en Ecuador

Ruta a caballo por los Andes. ©Chamidae Ford/Lonely Planet
Montar a caballo junto a los chagras en los Andes ecuatorianos es una experiencia cultural y natural sin igual. En la región del Cotopaxi, los viajeros recorren paisajes volcánicos a paso lento, vestidos como auténticos vaqueros de altura. Con vistas imponentes, historia viva y un lazo profundo con la tierra, esta ruta revela la esencia de la “avenida de los volcanes”.
5. Cabalgata criolla en Luisiana (EE UU)

Indumentaria tradicional en la cabalgata criolla. ©Adam McCulloughShutterstock
Las cabalgatas criollas de Luisiana celebran las raíces afroamericanas de la cultura vaquera en EE. UU. Con desfiles a caballo, música zydeco, baile y cocina criolla, estas festividades comunitarias combinan tradición, orgullo e inclusión. Una oportunidad única para vivir el legado de los vaqueros criollos y sentir el auténtico espíritu del sur rural estadounidense.
6. Visitar la región vinícola de Willamette en Oregón (EE UU)

Willamette Valley, Oregon. ©LeslieBrienza/Getty Images
La región vinícola de Willamette, en Oregón, ofrece una experiencia íntima entre viñedos, posadas rurales y productos frescos de granja. Con menos turismo que Napa, brilla por su autenticidad, su excelente pinot noir y paisajes espectaculares. De las catas en Dundee Hills a las cenas en locales acogedores, es el destino ideal para disfrutar del lujo sin pretensiones.
7. Colaborar como científico aficionado en el Amazonas (Perú)

Amazonas, Perú. ©Qualtaghvisuals/Shutterstock
En la Reserva Nacional Tambopata, los viajeros pueden convertirse en científicos aficionados colaborando en proyectos de conservación junto a biólogos mediante el innovador programa Wired Amazon. Desde instalar cámaras trampa hasta estudiar insectos o grabar sonidos de primates, la experiencia combina aventura, ecología y aprendizaje práctico, contribuyendo directamente a proteger una de las selvas más biodiversas del planeta. Una inmersión transformadora en la naturaleza y el ecoturismo regenerativo.
8. Fiesta en el Caribe (Granada)

Vista de las casas de Granada. ©Timothy O'Keefe/Getty Images
En Granada, la fiesta es parte esencial de la vida, y el Spicemas —su carnaval de agosto— es el punto álgido del calendario. Esta celebración vibrante une música soca, disfraces, desfiles y el simbólico J’ouvert, donde los participantes se cubren de aceite y pintura como acto de resistencia cultural. Con eventos durante todo el año, playas paradisíacas y un ambiente hospitalario, Granada garantiza una experiencia festiva inolvidable.
9. Alojarse en la Volcano House de Hawái, Volcanoes National Park (EE UU)

Volcanoes National Park. ©Michelle Mishina Kunz/Lonely Planet
Alojarse en la Volcano House, dentro del Parque Nacional de los Volcanes de Hawái, es vivir frente al volcán activo Kīlauea. Con vistas directas al cráter Halemaʻumaʻu, esta histórica posada ofrece una inmersión plena en el poder natural y cultural de la isla. Combina alojamiento asequible, tradición hawaiana y la posibilidad única de contemplar lava desde la ventana. Una estancia inolvidable a los pies de la diosa Pele.