Una escapada "veraniega" para el puente de mayo
Si la opción de Canarias como destino para este puente de mayo, ya solo falta dar el último paso y decidirse por una de sus 8 islas. Aquí dejamos un breve apunte de lo mejor de Canarias para elegir la isla que mejor se adapte a los deseos de cada viajero.
1. Gran Canaria, diversa y artística
Tejeda, Gran Canaria, Canarias, España © Aleksandar Todorovic / Shutterstock
Junto a Tenerife es el gran foco turístico del archipiélago, a donde acuden los viajeros en busca principalmente de ambiente agradable, buenas playas y excelentes temperaturas durante todo el año. Ahora bien, Gran Canaria, además, aglutina una interesante oferta en ocio que va desde Carnavales y fiestas desenfrenadas a pie de playa hasta festivales de cine o ciclos de ópera. Los espíritus viajeros más tranquilos que apuesten por una escapada durante el puente de mayo podrán optar por el escarpado interior de Gran Canaria, donde ahondar en la esencia de la isla, con paisajes montañosos salpicados de palmeras, barrancos y pueblos antiguos, entre los que no puede faltar Tejeda, que compiten en encanto con el casco histórico de Las Palmas.
2. El Hierro, pequeña y natural
Playa del Verodal, El Hierro, Canarias, España © gadzius / Shutterstock
Si uno quiere alejarse de las masas y disfrutar de un entorno natural y sostenible –es la primera isla completamente autosuficiente a través de fuentes de energía renovables–, este es su lugar. La isla más occidental y pequeña del archipiélago espera en el puente de mayo al viajero deseoso de tranquilidad, de paseos por caminos legendarios, de baños en charcas naturales, alejadas de las playas y de submarinismo. Aquí el contacto con la naturaleza más agreste es total.
3. Lanzarote, éxotica y auténtica
Guatiza, Lanzarote, Canarias, España © Mariusz witulski / Shutterstock
Tal vez los paisajes de Lanzarote sean los más surrealistas (o por lo menos, los más volcánicos) de las islas Canarias. Solo para verlos, ya vale la pena desplazarse hasta aquí en el puente de mayo. El artista y activista César Manrique ha sido uno de los artífices de mantener intacto el paisaje a través de su legado artístico, y merece mucho la pena recorrerlo. Disfrutar de playas de arena negra, y también doradas, como la preciada playa de Papagayo, así como explorar el Parque Nacional de Timanfaya y el sorprendente Museo Atlántico, bajo el mar, en la Bahía de Las Coloradas, son imprescindibles en esta sorprendente isla.
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4. La Gomera, mágica y natural
Parque Nacional de Garajonay, La Gomera, Canarias, España © RossHelen / Shuttersetock
Profundos desniveles, repletos de barrancos y valles, dibujan la orografía de esta mágica isla canaria, que merece explorarse desde lo alto de sus miradores. Ahora bien, la magia de La Gomera se percibe desde las alturas, sí, pero también recorriendo sus enclaves naturales más singulares ya sea a pie, como el Parque Nacional de Garajonay, o en barca, explorando la rica fauna marina de sus costas. De ahí su merecedor título de Reserva de la Biosfera. La magia también se palpa en las calles de sus ciudades y pueblos como San Sebastián o Agulo e incluso en el aire, a través del centenario silbo gomero, el lenguaje silbado que se usaba para comunicarse entre valles y barrancos.
5. Tenerife, la isla de las mil caras
El Teide, Tenerife, Canarias, España © Kochneva Tetyana / Shutterstock
Sus grandes dimensiones y su rica diversidad permiten ofrecer diferentes opciones al viajero. Es la isla donde posiblemente se concentren más complejos turísticos, especialmente en el sur. Y es la que más ha apostado por propuestas de gran lujo, donde no falta detalle. Cuenta con grandes ciudades y ejes costeros muy desarrollados, así como con pueblos rurales llenos de atractivo y personalidad. Para aquellos viajeros que apuesten por un turismo más activo, ávidos de senderismo en pleno puente de mayo, Tenerife tiene como gran baza el Parque Nacional del Teide, con un paisaje único, rodeado de lava petrificada y cráteres que envuelven el gran pico del Teide, el más alto del país.
Lo mejor de Europa: costa oriental de Tenerife, islas Canarias
6. Fuerteventura, perfecta para perderse
Playa de Cofete y playa de Barlovento, Fuerteventura, Canarias, España © lunamarina / Shutterstock
Posiblemente una de las mejores islas para desconectar, rodeado de áridos paisajes que conducen hasta icónicas playas. Las fuertes ráfagas de viento en ciertas zonas de la isla permiten que la práctica de deportes acuáticos como el windsurf o el kitesurf sea considerado como una celebración religiosa a la que los fieles devotos asisten con fervor. Siempre es buen momento para iniciarse en alguno de estos deportes, y el puente de mayo puede ser el momento perfecto. Más allá del agua, la desconexión en Fuerteventura pasa por rutas en bici por caminos secundarios y excursiones en 4x4. Todo ello en una isla declarada Reserva de la Biosfera.
7. La Palma, arrebatadora sin artificios
La Palma, Canarias, España © Jacinto Marabel Romo / Shutterstock
Rodeada de naturaleza, con un ambiente tranquilo y sereno, La Palma es un lugar perfecto para escaparse en el puente de mayo y disfrutar de unos días de playa y aire libre. Desde practicar senderismo por la Caldera de Taburiente y ascender al Roque de los Muchachos, hasta adentrarse en el bosque de Los Tilos, las rutas que permiten perderse por la isla son múltiples y variadas para todo tipo de gustos. La llaman “la isla bonita de las Canarias” y los motivos son visibles incluso de noche. El que fuera el primer destino turístico Starlight del mundo, ofrece hoy un amplio programa de actividades centradas en la observación astronómica bajo uno de los cielos más admirables del planeta.
Lugares para contemplar el cielo
8. La Graciosa, un secreto a buen recaudo
La Graciosa, Canarias, España © underworld / Shutterstock
La recién reconocida isla canaria deja de ser un secreto para ofrecerse a los ojos de los viajeros. Este coqueto enclave de pueblos de casitas blancas, playas vírgenes de aguas turquesas y paisaje volcánico, apenas tiene carreteras asfaltadas. Rutas en bici, senderismo y pura contemplación a pie de playa son las principales actividades de un destino de apenas 29 kilómetros cuadrados que puede dar mucho de sí. Este puente de mayo es un buen momento para visitarla, antes de que corra la voz y su genuina esencia empiece (o no) a desvanecerse.
