Uno de los mejores momentos para viajar a Ibiza y Formentera
Semana Santa es tiempo de escapada, de huir de la rutina y rendirse al placer, la belleza y el descanso que ofrecen las islas de Ibiza y Formentera. Sin aglomeraciones ni prisas y con toda la riqueza natural del lugar, es imposible resistirse a ellas y a sus rincones más secretos.
Semana Santa marca el punto de inicio de la temporada estival en las islas Pitiusas y, si bien sus atractivos hacen que apetezca explorarlas durante todo el año, es ahora cuando los días de playa y campo al aire libre, y los hipnóticos atardeceres cobran mayor fuerza. Recorrerlas es tan fácil como ahondar en su belleza natural, por lo que aquí va una selección de enclaves en los que sentir la esencia más pura de estas dos islas.
Lugares secretos de Ibiza y Formentera
Hay que aparcar el lado más festivo y animado de las islas para sentir su magia y sumergirse en aquellos enclaves menos conocidos, más prístinos y genuinos. Son rincones que, si bien no son del todo secretos, sí que buscan alejarse de las masas. Aquí una muestra:
1. Cala Saladeta
Cala Salada y Cala Saladeta, Ibiza, Baleares, España © Tono Balaguer / Shutterstock
Su estampa idílica de aguas turquesas y arena casi blanca la convierten en un bien muy preciado en la isla de Ibiza que, junto al tándem que forma con su hermana mayor Cala Salada, merece la pena explorar y disfrutar. Acceder a ella, ya sea saltando entre rocas o atravesando un largo sendero provisto de buenas vistas, no es fácil pero la recompensa vale mucho la pena.
2. Cova des Culleram
Se trata de un templo sagrado dedicado a Tanit, la diosa cartaginesa de la fertilidad y el amor. Situada al noreste de Ibiza, en el municipio de Sant Joan de Labritja y a escasos km de cala Sant Vicent, la enigmática cueva posee varias salas más de recomendable visita.
3. Faro de Portinatx
Faro de Portinatx, Ibiza, Baleares, España © Alberto Loyo / Shutterstock
Sus 52 m de altura lo convierten en el faro más alto de todas las islas Baleares y su emplazamiento, en el más septentrional de Ibiza. Está situado en la Punta des Moscarter, un lugar virgen de gran valor ecológico, al que se accede a través de un camino que parte desde la playa Es Port y recorre un pintoresco sendero entre acantilados, calas y pinares. El trayecto, de unos 30 minutos hasta el faro, regala vistas únicas del Mediterráneo con Mallorca de fondo.
4. Es Portitxol
Es posiblemente una de las calas más remotas de la isla de Ibiza. Se accede a ella tras una caminata de unos 20-25 minutos bordeando la costa noroeste de la isla, tras la cual uno puede disfrutar de un paraje de gran atractivo, en forma de herradura y rodeada de acantilados.
5. Sant Francesc de s’Estany
Iglesia de Sant Francesc de s'Estany, Ibiza, Baleares, España © nito / Shutterstock
A escasos 6 kilómetros de la ciudad de Ibiza, este municipio fue antaño base de los trabajadores de las salinas de la zona. Hoy, situado junto a Ses Salines, presume de un ambiente pausado, una iglesia de gran belleza y un rico entorno natural con senderos, ideales para recorrer durante Semana Santa, que conducen a estanques y calas capaces de impresionar hasta al más aséptico.
El ocaso como nunca antes
¿Existe algo más evocador que una puesta de sol amenizada con música ambiente? En Ibiza y Formentera los atardeceres cobran una nueva dimensión y Semana Santa es una buena excusa para viajar y descubrir algunos de los mejores lugares para disfrutar de ellos. Tómese buena nota:
1. Platges de Comte
Atardecer en les Platges del Comte, Ibiza, Baleares, España © Alberto Loyo / Shutterstock
Cuenta con uno de los atardeceres más singulares de las Pitiusas puesto que al atractivo del momento se le suman varios islotes que dibujan un peculiar perfil a este paraíso natural.
2. Benirràs
Aquí el espíritu hippy se mantiene vivo y se palpa en los atardeceres de esta playa de arena fina, especialmente los domingos, cuando el espectáculo natural se ameniza con el ritmo de los tambores dando su último adiós al astro rey.
3. Stonehenge ibizenco
Ocaso en el Stonehenge ibizenco, Baleares, España © Bartu Juan / Shutterstock
A diez minutos a pie desde Cala Codolar, por un trayecto sin señalizar se llega hasta el bautizado como el Stonehenge ibicenco, un monumento basado en 13 columnas de basalto dispuestas en semicírculo, obra del artista australiano Andrew Rogers. Acceder hasta aquí y disfrutar del atardecer, viendo como el sol se esconde entre los diferentes bloques, es todo un espectáculo.
4. Ses Salines
Ver cómo el sol se refleja sobre las aguas de los estanques de las salinas es un buen punto y final tras disfrutar del día por la isla de Ibiza. En pleno parque natural, el lugar presume de calma y tranquilidad, ajeno a las rutas más turísticas.
5. Torre des Savinar
Torre des Savinar, Ibiza, Baleares, España © Anton Calpagiu / Shuttetstock
Conocida también como torre del Pirata, es una torre defensiva, situada a 200 metros sobre el nivel del mar, cuyo entorno es tan singular que resulta el lugar perfecto para disfrutar del crepúsculo frente a los islotes de Es Vedrà y Es Vedranell.
6. Cap de Barbària
Su árido paisaje parece sacado de otro planeta, pero se trata del extremo más meridional de Formentera con el faro presidiendo el lugar. Para disfrutar de la puesta de sol en toda su plenitud, merece la pena acercarse hasta su extremo y para ello, antes habrá que aparcar al norte de faro para luego caminar unos 30 minutos.
¡Qué vivan los pueblos!
El encanto de lo rural atrae al viajero hasta los pueblos y rincones más cautivadores de las islas. La esencia genuina y global de Ibiza y Formentera se experimenta con los cinco sentidos a través de sus paisajes, su gente y su gastronomía. Y, ¿qué mejor que darse un homenaje en plena Semana Santa que disfrutando de propuestas tanto internacionales como tradicionales y de autor? Sea con el último ingenio creativo de un chef con estrella o con un sofrit de pagès, bullit de peix o un simple y apetitoso flaó, la diversidad gastronómica es rica y variada. Toma el pulso a la isla en localidades como:
1. Sant Francesc Xavier
Centro de Sant Francesc Xavier, Formentera, Baleares, España © Sergio TB / Shutterstock
Tranquila y con mucho encanto, la capital de Formentera, conserva su esencia pura y mediterránea con una iglesia encalada como centro neurálgico y una variada propuesta de comercios y restaurantes.
2. Santa Gertrudis de Fruitera
Con una rica oferta en restauración, es una de las localidades con más ambiente del centro de la isla de Ibiza. Su ambiente relajado se convierte en el mejor contrapunto a la oferta más costera.
3. Sant Joan de Labritja
Sant Joan de Labritja, Ibiza, Baleares, España © Pawel Kazmierczak / Shutterstock
Coqueto, de un blanco impoluto y rodeado de un paisaje natural envidiable. Viajar hasta el norte de la isla de Ibiza y pasear por sus calles es rendirse al puro hechizo rural de la isla.
4. Sant Carles de Peralta
Situado al noroeste de Ibiza, esta localidad de aire tradicional acoge el icónico mercadillo de Las Dalias (abierto todos los sábados a partir de las 10.00) por donde pasear, sentir el ambiente y caer en la tentación comprando algún recuerdo de la escapada de Semana Santa. Eso sí, se corre el riesgo que tal sea la atracción de las Pitiusas que de regreso a casa ya se estén contando los días que quedan para las vacaciones de verano.
