Playas de ensueño, arrecifes de coral, impresionantes volcanes…
¿Qué más puede pedir un alma aventurera? En Hawái se vive al aire libre y se defiende el valor tradicional del amor y el respeto por la tierra, el aloha ‘aina. La herencia multicultural que puebla las islas y unos atardeceres que cortan la respiración son el colofón perfecto a la aventura de viajar a Hawái.
Surf en Oahu
Hawái tiene la fortuna de estar en la trayectoria de las enormes islas que recorren el Pacífico y la costa norte de Oahu se ha convertido en una de las mecas mundiales del surf.
Los surferos experimentados pueden comenzar sus días al amanecer de los días invernales, cuando ya se ha acabado la temporada alta. Si uno no está en un nivel tan avanzado pero practicar surf en Hawái es uno de sus sueños, puede esperar al verano, cuando el oleaje se suavice.
La mejor época del año
Febrero y marzo son los mejores meses para los surferos que están iniciándose; los expertos pueden aventurarse a buscar las olas más grandes (hasta 10 m), que llegan entre noviembre y febrero.
‘Kiteboard’ en Maui
En Maui el viajero encontrará el mejor viento y podrá volar su cometa en las mejores condiciones. La costa norte de esta isla tiene lugares como Kanaha Beach, o Kite Beach, un tranquilo tramo costero con fantásticas vistas de las West Maui Mountains donde el kiteboard se ha convertido en una práctica habitual e incluso se han reservado zonas especiales para los kiteboarders. Para comenzar, el viajero puede tomar unas clases: aprender a hacer volar la cometa, luego dejarse llevar por ella en el agua y, finalmente, montarse en la tabla.
La mejor época del año
Desde junio hasta septiembre.
Ruta Kalalau
El antiguo sendero que discurre por los valles de Na Pali Coast, en Kauai, se ha convertido en la ruta Kalalau, un bello y emocionante camino que permite entrar en contacto directamente con la naturaleza. El camino atraviesa cascadas, playas y espectaculares paisajes hasta terminar en los acantilados de Kalalau, donde la tierra verde se funde con el mar turquesa. La excursión clásica implica caminar 18 km hasta el Kalalau Valley y acampar un par de noches en Kalalau Beach. Se necesitan permisos y, dada la afluencia de público, se recomienda tramitarlos con antelación.
La mejor época del año
Agosto.
Actividades urbanas
Pasar unos días en Honolulu no quiere decir que haya que bajar el ritmo porque esta activa ciudad siempre ofrece algo que hacer. Las playas y las montañas están al lado y ofrecen la posibilidad de practicar surf, body board, paddleboard o natación en el mar. También hay pistas de tenis gratuitas en la ciudad y abundantes campos de golf en las cercanías.
La mejor época del año
Todo el año.
Grandes experiencias senderistas
Si el viajero desea una experiencia senderista única, puede decantarse por Alakaʻi Swamp, una reserva natural de más de 50 años que permite a los excursionistas atravesar un paraíso pantanoso a través de un sendero cubierto casi por completo de tablones de madera. Este territorio fantástico incluye ciénagas que llegan hasta la rodilla, diminutas plantas carnívoras, el maravilloso panorama del paisaje del valle de Wainiha y el lejano océano desde el mirador de Kilohana. El pantanal posee sus propios biorritmos y alberga aves endémicas, algunas en peligro de extinción.
La mejor época del año
De abril a noviembre.
Caminar entre volcanes
La magia del Hawaiʻi Volcanoes National Park está en sus 240 km de senderos. El viajero aventurero podrá elegir entre Mauna Iki Trail, la concentración de petroglifos de Puʻu Loa, el escabroso terreno de Napau Crater Trail o la caminata más suave de Puʻu Huluhulu Trail, el Kipuka Puaulu o el Halemaʻumaʻu Trail, un sendero que en su momento recorrió Mark Twain. Y además de todo esto, por supuesto, hay que visitar los dos volcanes en activo: el Maunaloa, que entró en erupción por última vez en 1984, y el Kilauea, en erupción desde 1983, que todavía expulsa lava. Toda una lección de geología en directo.
La mejor época del año
De mayo a octubre.