Salzburgo se vanagloria de ser un escenario mundial, quizá por haber sido la ciudad natal y de trabajo de Wolfgang Amadeus Mozart. Se puede visitar su casa natal, Mozart Geburtshaus, donde el compositor vivió hasta los 17 años, en la Getreidegasse, en pleno laberinto de callejuelas en el barrio antiguo. Y es que el genial compositor dejó su rastro en muchos enclaves de la ciudad, como como en los Jardines de Mirabell, donde se encuentra el Mozarteum una institución que preserva la obra y figura del hijo predilecto de Salzburgo y la pone en contacto con las tendencias actuales.
Heart of Mozart, Salzburgo, Austria © Flaminia Pelazzi
Un día con los genios
O la propia catedral, sitio de bautizo del músico y en cuyo órgano dio un concierto en 1703. Y es que la figura de Mozart atrae a melómanos de todo el mundo a visitar una ciudad que se vuelca en la protección de su memoria, por ejemplo, celebrando la Semana de Mozart, en enero. Escuchar música de Mozart en directo mientras se cena es una de las interesantes ideas que la ciudad propone para sus veladas, en concreto en el restaurante Stiftskeller St. Peter, al lado del monasterio de San Pedro. Y es que la figura de Mozart es todo un símbolo de la ciudad.
Velada en el restaurante Stiftskeller, Salzburgo, Austria © Flaminia Pelazzi
La ciudad fue también el set cinematográfico principal de la película Sonrisas y lágrimas y las peripecias de la popular familia von Trapp. Este famoso musical se basó en una novela que explica la historia de una familia real que vivió en Salzburgo hasta su huida a los Estados Unidos con la llegada del nazismo en 1938. Son muchas las rutas organizadas que visitan los enclaves de la película, y los eventos culturales que tienen como eje conductor el hilo de este popular musical protagonizado por Julie Andrews y Christopher Plummer, pensados para los fieles seguidores de esta bonita cinta. En el 2018 se ha inaugurado, además, The Sound of Music Museum (Museo de Sonrisas y lágrimas), donde se puede conocer no solo los pormenores de la películas sino también la historia de la familia Von trapp que la inspiró.
Museo de Sonrisas y lágrimas, Salzburgo, Austria © Flaminia Pelazzi
Y es que desde que Hollywood selló su estela en este lugar, el nombre de Salzburgo resonó con fuerza por todo el planeta, y con ese empuje se dieron a conocer sus festivales y eventos culturales, que hoy en día se cuentan por millares. Hasta 4500 eventos que resaltan la importancia que la ciudad austríaca le ha dado siempre a la cultura, especialmente con el Festival de Salzburgo, fundado en 1920 y que da cabida a conciertos, óperas y obras de teatro de reconocimiento mundial.
Es tanta la vida musical de Salzburgo durante los meses de verano que parece que el aire de la ciudad queda impregnado de melodías de todos los tiempos. Hay que buscar entre los sitios más escondidos de la ciudad para encontrar pequeñas perlas.
Siemens Fest, Festival de Salzburgo, Salzburgo, Austria © Tourismus Salzburg / Foto: Breitegger Günter
La música también guía hacia los pies de la colina Mönchsberg. Aquí, el distrito Festspielbezirk o ‘de los festivales’ acoge dos interesantes edificios de Clemens Holzmeister, levantados entre 1956 y 1960. Se trata de la Kleines Festspielhaus y la Großes Festspielhaus, la pequeña y la gran casa de los festivales, respectivamente, espacios escénicos de primer orden de la cultural ciudad y sede del Festival de Salzburgo. Este es, sin duda, el acontecimiento cultural más importante de la ciudad. Durante 42 días, en el 2018 entre el 20 de julio y el 30 de agosto, la ciudad vibrará con un total de 195 acontecimientos en diferentes escenarios urbanos.
Representación de 'Jedermann' en la plaza de la catedral, Salzburgo, Austria © Tourismus Salzburg
Bajo el leitmotiv "Pasión y Éxtasis”, Markus Hinterhäuser, director del festival, ofrece cinco nuevas escenificaciones de ópera y teatro y un amplio número de conciertos para ilustrar las diversas caras y distintas manifestaciones del poder de las emociones. Entre los eventos más importantes cabe destacar La flauta mágica de Wolfgang Amadeus Mozart. Además la Ouverture spirituelle se celebrará bajo el lema Pasión y nos ofrecerá obras acerca de la pasión y la entrega. Por otro lado, la representación de Jedermann en la plaza de la catedral, trae en 2018 a Tobias Moretti y Stefanie Reinsperger en los papeles principales de Jedermann y Buhlschaft. Esta obra tradicional del Festival ha llegado a escenificarse más de 650 veces en los últimos 100 años.
Teatro de Marionetas, Salzburgo, Austria © Flaminia Pelazzi
Pero no solo la música sino todo tipo de artes escénicas se manifiestan en esta Salzburgo cultural. Una de las muestras más especiales de ello se da en el Teatro de Marionetas de la ciudad con más de 105 años de historia. Por su pequeño escenario han desfilado centenares y centenares de marionetas, algunas de las cuales se conservan en las vitrinas que dan paso al teatro principal, y que muestran la evolución a lo largo de la historia de estos fantásticos títeres. En el teatro aún se confeccionan marionetas a la vez que se forma a todos aquellos interesados en conservar el difícil y a la vez delicioso oficio de titiritero. Dejarse seducir por las clásicas historias de las óperas de Mozart o la representación en marionetas de Sonrisas y lágrimas es una magnífica manera de conectar con el siempre espíritu cultural de Salzburgo.
Una escapada a Salzburgo, historia entre montañas
Mercado de Navidad, Salzburgo, Austria © Tourismus Salzburg / Foto: Breitegger Günter
Y ya en diciembre los Mercados de Navidad llenarán de encanto la ciudad austriaca, pero será sobre todo el 200 aniversario del villancico Noche de paz el que pondrá la banda sonora tradicional a las veladas navideñas. Y es que fue muy cerca de la ciudad de Salzburgo, en el pequeño pueblo de Oberndorf, sonó por primera vez en la noche de Navidad de 1818 la famosa melodía y Salzburgo lo celebrará con numerosos recitales y conciertos.
