El centro de Oslo es compacto, con mucha personalidad y cómodo para andar. La calle principal, Karl Johans gate, traza un eje señorial este-oeste desde la estación central hasta el Palacio Real. Si...
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Los días soleados da gusto unirse a la gente que abarrota Aker Brygge y Tjuvholmen (“isla del Ladrón”), para pasear, comer y admirar su arquitectura. Aquí se encuentran dos de los mejores museos de...
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Aunque la parte oeste de Oslo, con el suelo más caro del país, sea ante todo un sector residencial, sus arboladas calles con villas señoriales y edificios de pisos del s. XIX desplegados en abanico...
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Basta echar un vistazo a Grünerløkka –“Løkka”– para preguntarse si cabrá en el barrio otro bar, café, tienda vintage o local de música en directo. Aquí se cita lo más granado de la creatividad de Oslo...
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El lado este de la ciudad se caracteriza por los contrastes. Barrios de clase trabajadora se han ido transformando por la cuantiosa población inmigrante y la escalada de precios. Sofienberg es...
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Los restaurantes y bares de estos barrios ajenos al turismo están en auge gracias a su gran población de estudiantes y profesionales jóvenes. Tanto si el viajero se limita a los restaurantes de St...