Esta isla salpicada de agujas rebosa historia. En su centro está el Christiansborg Slot, sede del Gobierno danés. Por debajo yacen vestigios medievales de Copenhague, mientras que en sus alrededores hay muchos museos, incluido el Thorvaldsens Museum. Añadiendo un fuerte contraste se halla el Diamante Negro de la Biblioteca Real, uno de los edificios más aclamados de Escandinavia.
Se empieza el día visitando el Christiansborg Slot, que alberga los elegantes Salones Reales de Recepción y las ruinas más antiguas de la ciudad. No cuesta nada subir a la torre, que ofrece un panorama extraordinario de la urbe.
Para un almuerzo memorable hay que reservar en el Tårnet, el restaurante de la torre. De lo contrario, se puede comer algo sencillo y barato en el café Øieblikket, junto al puerto en el Diamante Negro, el espectacular edificio que forma parte de la Det Kongelige Bibliotek.
Tras terminar de explorar la biblioteca, se puede pasar el resto del día admirando las bellezas cinceladas del escultor más venerado de Dinamarca en el Thorvaldsens Museum. Si no, se puede aprender más sobre una parte poco conocida de la sociedad danesa en el Dansk Jødisk Museum o buscar inspiración teatral en el Teatermuseet. No hay que irse de la isla sin fotografiar el Børsen, uno de los edificios más antiguos y bonitos de Copenhague.