Recomendaciones de viaje para que ir a Vietnam sea una gran experiencia
Viajar por Vietnam es una delicia, desde las elevadas montañas y los fascinantes pueblos étnicos del norte hasta los extensos arrozales y los vibrantes canales del delta del Mekong en el sur, con más de 3000 km de gloriosas costas en medio. Si a todo ello, además, se le suma una buena infraestructura de transporte con autobuses, trenes y vuelos, y abundante, excelente y económica comida callejera, a nadie sorprenderá que Vietnam figure en tantísimas listas de ‘destinos a los que viajar antes de morir’.
Como cualquier otro país, Vietnam tiene sus inconvenientes, y algunos viajeros regresan con historias de estafas, carreteras frenéticas y vendedores agresivos. Seguir los consejos que se listan a continuación ayudará a evitar estos ‘grandes males’ y a que uno regrese a casa con buenos recuerdos, además de con el clásico sombrero cónico.
Dos señoras en Hanói. Aprender unas pocas palabras en vietnamita da mucho de sí, ya sea para pedir comida en un puesto de la calle o para hacer autostop en las tierras altas, Vietnam © Matt Munro / Lonely Planet
Ser abierto con los vietnamitas
Vietnam ha estado tan expuesto a los extranjeros que la mayoría de los lugareños no sienten tanta curiosidad por los visitantes como sus vecinos de Camboya, Myanmar y Laos. También porque la mayoría de vietnamitas no se sienten muy seguros hablando inglés, a pesar de que lo aprenden en la escuela, tienden a ignorar a los viajeros que parecen perdidos, a menos que estos les pidan ayuda. Pero de lo que no hay duda es de que los vietnamitas son gente acogedora. Si se les pregunta algo con una sonrisa y hablando despacio, en inglés, lo más probable es que se reciba una respuesta acompañada de otra sonrisa. Expresiones tan sencillas como xin chào ('hola', pronunciada 'sin chou’) y cám ơn (‘gracias', pronunciada 'kam un') tienen mucho recorrido.
Conectarse a internet en Vietnam
Aunque la mayoría de hoteles, cafés y restaurantes tienen wifi, es fácil comprar una tarjeta SIM y conectarse a internet por tan solo 3 US$. Los nombres de las calles vietnamitas son realmente largos (muchas calles llevan nombres de personas), por lo que, para la mayoría de los viajeros los mapas digitales son más prácticos que los de papel. También resulta práctico tener un número de teléfono local para quedar con los guías o hacer reservas de último minuto durante el viaje. Las tarjetas SIM se venden en colmados y son fáciles de recargar. Cuando ya se ha comprado la tarjeta, el proceso para registrarse en internet puede ser complicado, así que conviene pedir ayuda al tendero o en la recepción del hotel.
La comida de la calle es una de las maravillas de Vietnam, y se paga en efectivo, Hanói, Vietnam © Boris-B / Shutterstock
Fijarse bien en los billetes de dongs
El dong (VND) es la moneda de Vietnam y se presenta en billetes que van de los 200 a los 500 000 dongs (10 000 dongs son 0,38 € en el momento en que se editó este artículo). Aunque la idea de convertirse en ‘millonario’ vietnamita es emocionante, aclararse con tantos ceros puede resultar abrumador, sobre todo teniendo en cuenta que algunos billetes tienen aspectos muy similares; por ejemplo, el billete de 10 000 VND y el de 200 000 VND son ambos de un color marrón rojizo, mientras que el de 20 000 VND y el de 500 000 VND son ambos azulados. Cuando hay prisa, es muy fácil pagar con el billete equivocado en un taxi. No está de más dedicar un par de minutos a ordenar los billetes en la habitación para evitar errores; y si uno se equivoca, lo mejor es tomárselo con calma. Por lo general, enfadarse nunca saldrá a cuenta.
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Las tarjetas de crédito y débito internacionales se aceptan en casi todos los grandes hoteles, restaurantes y agencias de viajes (a veces con algún recargo), pero en Vietnam el pago en efectivo sigue dominando las transacciones cotidianas. Abundan los cajeros automáticos y es posible cambiar moneda en los bancos (y en algunas tiendas de oro, aunque esta práctica no está bien vista por el gobierno).
Conviene recordar que el sistema oficial que separaba los precios para vietnamitas y extranjeros –y que se aplicaba a todo, desde billetes de tren hasta entradas de puntos de interés– ya pertenece al pasado.
Cuidado con los timos de los taxis
Para mucha gente los mototaxis son la mejor forma de ver las abarrotadas calles de Hanói y Ciudad Ho Chi Minh; sin embargo, las estafas son habituales y la mejor protección contra ellas es conocer bien el destino y algunos puntos de referencia del trayecto. Siempre hay que acordar un precio de antemano y estar preparado para pagar más que un lugareño. Para los taxis regulares, conviene ceñirse a las dos principales compañías, Mai Linh y Vinasun (ambas tienen app). Los taxis más pequeños e independientes tienen fama de contar con taxímetros muy rápidos y conductores agresivos. Si el viajero se halla en una de las grandes ciudades del país, apps como Uber y Grab son un buen recurso, ya que ofrecen taxis y mototaxis; a veces el conductor llamará para confirmar la reserva, por lo que tener a mano a alguien que hable vietnamita siempre será muy práctico.
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Arrozales de la provincia de Lao Cai, cerca de la frontera con China. Los autobuses, los vuelos y los trenes hacen que desplazarse por Vietnam sea relativamente sencillo © Sarawut Intarob/500px
Conocer bien las opciones de transporte en Vietnam
Los autobuses nocturnos son una buena manera de recorrer largas distancias y ahorrarse dinero en alojamiento. No obstante, los asientos no ofrecen mucho espacio para las piernas, así que para los pasajeros más altos (esto es, todos los que midan más de 1,60) será imposible estirar las piernas. Aunque las literas superiores ofrecen un poco más de privacidad, es fácil que estén a la altura de las farolas de la calle. Es recomendable usar antifaces para dormir y unos cascos que limiten el ruido (sobre todo si el autobús pone música o películas).
Dicho esto, a veces lo mejor es pagar un poco más y tomar un vuelo. Vietnam cuenta con varias aerolíneas de bajo coste que ofrecen billetes económicos, pero tienen fama de ir siempre con retraso y de ser muy estrictas con el equipaje de mano. La aerolínea nacional, Vietnam Airlines, ofrece un mejor servicio y precios comparables si se reserva billete con antelación.
Precauciones en Vietnam
Los delitos violentos son muy poco habituales en Vietnam, y la tenencia de armas está estrictamente regulada; pero existen los tirones y, en menor medida, los carteristas. Conviene estar atento: es buena idea no usar mucho el móvil y otros artículos electrónicos al aire libre (incluso sentado en una terraza o yendo de paquete en una moto), y dejar el pasaporte en el hotel, ya que no hay motivo para llevarlo siempre encima.
Vietnam tiene una de las cervezas más baratas del mundo, pero hay que tener cuidado y no pasarse con la bebida. Los turistas ebrios que regresan a su hotel al alba, cuando apenas circulan coches, pueden ser vistos como objetivos fáciles. Si se va a regresar tarde al hotel, conviene hacerlo con un amigo y gastarse un par de dólares más en un taxi en lugar de un mototaxi.
Las motocicletas y el tráfico en general hacen que cruzar cualquier calle sea, al principio, una experiencia de lo más intimidatoria, Hanói, Vietnam © Matt Munro / Lonely Planet
Seguridad vial en grandes ciudades
A primera vista, el tráfico en Hanói y Ciudad Ho Chi Minh puede parecer aterrador. ¡Cruzar la calle en plena hora punta es casi misión imposible! Pero en todo este caos existe un método y, como un banco de peces, el tráfico se apartará alrededor del peatón mientras este no deje de moverse a un ritmo pausado y constante. Si no se está seguro, lo mejor es hacer como los lugareños y alzar una mano para ser visto entre el mar de cascos.
Si el viajero quiere pilotar una motocicleta, lo mejor es que se reserve para los destinos más tranquilos, como Hoi An, Dalat o Phu Quoc. Siempre hay que usar casco y estar atento al tubo de escape, que ha causado más de una quemadura en las pantorrillas. Como las motocicletas suelen circular muy cerca las unas de las otras, conviene colocar los pies apuntando hacia dentro y usar calzado cerrado, ya que los protege mejor.