Las islas Galápagos, en Ecuador, garantizan ver de cerca muchos animales, en tierra y en el mar. Este romoto archipiélago, conocido por los primeros exploradores como Las Islas Encantadas, no ha perdido un ápice de encanto con los siglos. Los visitantes caen bajo su hechizo mientras pasean entre leones marinos perezosos o descubren la abundante fauna aviar y las lentas tortugas gigantes de la zona.
Abundan los grandes mamíferos marinos. Los leones marinos y las focas reinan en las ricas aguas de la Corriente de Humboldt y los visitantes tienen casi garantizada la interacción con ellos. Navegando entre las islas se pueden ver delfines y ballenas. Los reptiles son las estrellas, con una muy notable presencia de tortugas gigantes, iguanas terrestres y marinas.
En marzo y abril no hay que perderse las curiosas danzas de cortejo de los albatros y los alcatraces patiazules. (www.galapagos.org)
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