Centro histórico
El corazón de Viena late en las calles en torno a su monumento más destacado, la catedral gótica Stephansdom. En la maraña de elegantes calles adoquinadas, adornadas con edificios barrocos de colores pastel, se encuentra la parte más antigua de la ciudad, que incluye el barrio medieval judío al norte y el tramo hacia la orilla sur del Canal.
Lo mejor en un día
El Innere Stadt vienés es compacto y resulta fácil recorrerlo a pie, sobre todo su centro, la Stephansdom y el barrio del centro histórico. La monumental catedral es un punto de partida ideal: resérvese medio día para explorarla y subir los 343 escalones de la torre sur, con amplias vistas sobre los tejados de la zona.
Almorzar en el neobeisln Huth Gastwirtschaft antes de dirigirse a la Haus der Musik y la Mozarthaus Vienna para descubrir la increíble herencia musical de la capital austriaca. Vale la pena visitar el Museum Judenplatz.
Tras cenar en el encantador Griechenbeisl, la noche es idónea para un paseo romántico por las calles iluminadas.