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Viajar con niños a Granada
La propia ubicación de la ciudad de Granada, con comunicación directa con la nieve y la costa, la hace especialmente atractiva. Pero además, la ciudad tiene su propio encanto. ¿Qué niño no soñaría con perderse en la ciudad del Castillo Rojo?
Perderse en el Castillo Rojo
La Alhambra fascina a los niños. Es conveniente que lleven calzado cómodo, agua y protección solar. No se permiten carritos, aunque ofrecen consignas y mochilas portabebés. A partir de octubre, el programa “La Alhambra más cerca” organiza visitas guiadas para familias (adultos/niños 6/3 €; sa y do, 10.00-12.30)
Huir del mundanal ruido
La Huerta de San Vicente es un buen lugar para que los pequeños se desfoguen. Además de albergar la Casa Museo de Federico García Lorca, que organiza talleres infantiles de danza, poesía o teatro, este parque de 70 000 m2 ofrece arboledas, fuentes, un pequeño río y una zona de columpios con tirolina. En verano, hay cine los miércoles por la noche.
Experimentar y aprender
El Parque de las Ciencias es una de las mejores atracciones familiares de Granada. Los más pequeños pueden iniciarse en la sala Explora, mientras los mayores disfrutan de las noches del Planetario (previa reserva).
Viajar al pasado
El centro cultural CajaGranada (958 222 257; av. de la Ciencia, 2; S5) ofrece en su espacio Memoria de Andalucía talleres para familias (sa y do).
Tapear en familia
El benigno clima de marzo a octubre permite comidas familiares al aire libre en espacios tan entrañables y seguros como la plaza de Bib-Rambla, la Romanilla, el Campo del Príncipe, el paseo del Violón o el paseo de los Tristes.
