El patrimonio arquitectónico de Burdeos es excepcional. Los monumentos y edificios construidos a lo largo de los siglos se reparten por toda la ciudad. Algunos son discretos, casi invisibles, como los fragmentos de muralla galorromana enterrados en sótanos privados; pero en su mayoría se trata de vistosas construcciones, mejoradas gracias a una ambiciosa campaña de restauración que se ha llevado a cabo en el centro.
Los vestigios más importantes de la época galorromana son las ruinas del palacio Gallien, en el barrio del Jardin public.
Quedan muchas construcciones de la Edad Media, como la catedral de Saint-André, la basílica de Saint-Michel y la basílica de Saint-Seurin. También están la iglesia de Saint-Pierre, y la Grosse Cloche, puerta principal de la muralla del s. xiii, y el antiguo campanario del ayuntamiento.
La mayoría de casas de la época renacentista se encuentra en el barrio de la Grosse Cloche, el antiguo barrio de San Eloy, junto a Rue de la Rouselle (donde vivió Montaigne, en los números 23-25) y Rue de la Fusterie.
En el s. XVIII, por iniciativa del intendente Boucher y de su sucesor, el intendente Tourny, Burdeos, que se limitaba al interior de sus murallas desde las invasiones germánicas del s. iii, se abrió al río con la creación de la plaza real, actual Place de la Bourse. Magnífico ejemplo del estilo rococó (Luis XV), el pabellón central y los dos edificios que lo enmarcan forman una plaza perfectamente simétrica, buque insignia de lo que se conoce como la “fachada del muelle”. La mayoría de los edificios del barrio de los Quinconces y del Triangle d’Or pertenece a esta época. Algunas construcciones, más tardías, son de estilo neoclásico, prefacio de la arquitectura napoleónica. El más monumental es el Grand Théâtre, erigido entre 1773 y 1780 en el lugar donde se situaba un templo galorromano cuyos restos, los pilares de Tutelle, habían sido destruidos un siglo antes, bajo el reinado de Luis XIV.
Del s. XIX, Burdeos conserva el puente de piedra, la estación de Saint-Jean y el almacén Lainé, ahora transformado en el CAPC.
Al s. xx y comienzos del xxi no le han faltado las proezas monumentales, como el puente de Aquitania, remedo lejano del Golden Gate de San Francisco, las torres futuristas de Mériadeck y el Tribunal de Grande Instance diseñado por Richard Rogers. En el 2013, la finalización del puente levadizo Chaban-Delmas inauguró una serie de proyectos arquitectónicos, como el del nuevo estadio en el barrio de Lac (2015) o la asombrosa Cité du Vin, de la agencia XTU, en Bassins à flot. El auditorio Arkéa Arena y La Méca, y enseguida el Simone-Veil, constituyen una nueva página en la historia arquitectónica de Burdeos.
Queda atrás la época en la que el festival Sigma, cita europea de la vanguardia entre 1965 y 1990, fuese portada habitual en la prensa. La escena actual de Burdeos ofrece una programación más convencional pero aun así ecléctica.
Grand Théâtre
L’Auditorium
TnBA
Théâtre des Salinières
Manufacture
Théâtre Fémina
Arkéa Arena. Estrellas internacionales.
Rock School Barbey
I.Boat
Le Void
Café Pompier
Salle des fêtes du Grand Parc (05 33 89 46 03; 39 Cours de Luze)
Krakatoa (05 56 24 34 29 www.krakatoa.org; 3 Avenue Victor-Hugo, Mérignac). En un antiguo centro público, la asociación Transrock desarrolla y promueve música amplificada, con 1200 plazas y una programación que conviene seguir de cerca.
Le Rocher de Palmer
Sortie 13 (05 56 36 48 43; www.sortie-13.com; Rue Walter-Scott, Pessac). En la salida 13 de la circunvalación. Una buena programación musical y exposiciones.