El barrio real comprende el Palais Royal, el Palais de Justice y el Mont des Arts, donde los principales museos de Bruselas ocupan algunos de los edificios de mayor magnificencia de la ciudad, a escasa distancia entre sí. En torno a Place du Grand Sablon hay tiendas antiguas, salones de té y chocolaterías, mientras que las iglesias y el elegante Parc de Bruxelles aumentan el ambiente exclusivo de la zona.
El recorrido cultural arranca en los Musées Royaux des Beaux-Arts y el adjunto Musée Magritte. Se puede almorzar en una cafetería de Place du Grand Sablon o comprar algo para picar en Claire Fontaine y degustarlo en Place du Petit Sablon, a la sombra de la Église Notre-Dame du Sablon. Por la tarde hay que admirar el museo de instrumentos musicales de Bruselas, el MIM o visitar el Musée BELvue para saber más sobre la historia de Bélgica. Para cenar, se puede optar por comida de brasserie en Le Perroquet o reservar una cena gastronómica en Les Brigittines, antes de ver una película muda con acompañamiento de piano en directo en Cinematek.