A medio camino entre el bullicio de Dangriga y el ambiente turístico de Placencia se halla el tranquilo Hopkins, donde la vida no ha cambiado mucho en las últimas décadas. Los niños venden los pasteles de coco y chocolate de sus madres por la única calle de este pueblo garífuna; los hombres pescan de día y tocan el tambor de noche y el ritmo de la vida es lento. La playa es estrecha, pero con buen tiempo brinda espectaculares vistas al Caribe.
Hopkins
![Hopkins, Belice](https://lonelyplanetes.cdnstatics2.com/sites/default/files/styles/max_650x650/public/imprescindibles_images/Belice_Hopkins_shutterstock_182298380_Simon%20Dannhauer_Shutterstock.jpg?itok=c1Gsrw9e)
Simon Dannhauer_Shutterstock