Explora lo mejor en viajes 2024
Aunque solo fuera por los jardines tendidos a sus pies, también sería una maravilla. Los estanques y los arroyos artificiales vierten el agua en este plácido edén acuático y basta con levantar la mirada para quedarse boquiabierto ante semejante mole de 370 m de altura que irrumpe en el paisaje. Sigiriya, moldeada con arte y coronada por ruinas, es un imponente misterio que un maravilloso museo intenta diseccionar. Se sudará la gota gorda para subir a la cima, pero vale la pena.