Nuevas rutas, parques que no dejan de crecer y uno de los proyectos de resilvestración más ambiciosos del continente hacen que la Patagonia sea más salvaje y accesible que nunca.
¿Qué no te puedes perder?
- Visitar alguno de los glaciares en el Parque Nacional Los Glaciares, en Argentina.
- Probar el circuito Dientes, de cinco días, la ruta más meridional del planeta, para aliviar la presión de las rutas senderistas más trilladas.
Vista de los Andes en el Parque Nacional Torres del Paine, Chile. © ichywong/Shutterstock
En el lado argentino, el Parque Nacional Patagonia inaugurará, a finales del 2023, un planetario y un centro de interpretación que, junto con las nuevas rutas por antiguos yacimientos de arte rupestre en el Cañadón del Río Pinturas, podrían dar a este remoto lugar el protagonismo que merece.
Al otro lado de la frontera, el parque homónimo chileno ha reintroducido pumas, ñandúes y al amenazado huemul en estepas dañadas por décadas de explotación agrícola. Este parque es solo uno de los 17 que forman la Ruta de los Parques de Chile, de 2800 km, que abarca selvas subantárticas, grandes campos de hielo y una de las redes de fiordos más extensas del planeta. La iniciativa pretende inspirar a los lugareños y ofrecer puestos de trabajo.
Puma en invierno. © Ondrej Prosicky
Y si hace falta otra razón para visitar Chile en el 2024, que nadie olvide el eclipse anular de sol que oscurecerá los cielos de los dos parques nacionales de la Patagonia el 2 de octubre, generando aún más expectación en uno de los parajes más indómitos del planeta.