La vanguardia berlinesa

© www.ae-neukoelln.de/Franziska Kuffer, Heinz Schwarzzenberger
Pub Ä, Neukölin, Berlín, Alemania

Neukölin, de la autogestión a la modernidad

Berlín no para de cambiar y continuamente surgen nuevos barrios de moda. Lo último es Neukölin (al sur de Kreuzberg y del Landwehrkanal), al que algunos llaman Kreuzkölin. Este antiguo barrio conflictivo es hoy es el culmen de la modernidad. Hay que darse prisa para disfrutarlo, antes de que se aburguese y pase el testigo a otro territorio.

La subida de alquileres en los barrios céntricos de Berlín, incluso en Kreuzberg, obligó hace unos años a muchos artistas, estudiantes y gente alternativa a buscar nuevos territorios. Desde entonces, el norte de Neukölin (bautizado Kreuzkölin por su proximidad con Kreuzberg), resulta particularmente atractivo por su relajada atmósfera multicultural, que recuerda el Kreuzberg de la década de 1980. Estos son algunos de los sitios que no hay que perderse.

Los cafés de la Weserstrasse

En la Weserstrasse, los bares y cafés abren unos detrás de otros. Entre los más famosos destacan el café Fuchs und Elster (nº 207) y el bar Das Tier, en la esquina de la Fuldastrasse, con un decorado vintage y un ambiente más estudiantil. Los que prefieran ver cómo se mueve el arte berlinés de vanguardia, pueden asomarse a la galería Su de CouCou (nº 202), de la galerista Lena Braun, ambientada en tonos rosas y negros, como si fuera una caja de caramelos.

Café Jacques

En Maybachuter 8, es el local preferido de sibaritas y chefs, con un ambiente diferente que destaca por la iluminación de las velas, la cálida decoración, el fantástico vino y una carta de inspiración francesa y norteafricana. Es imprescindible reservar.

Türkenmarkt

Este animado mercado de productos agrícolas junto a un canal es perfecto para comprar todo lo necesario para un picnic: aceitunas, quesos cremosos para untar, crujiente pan y productos frescos al mejor precio de la zona.

Hüttenpalast

Una antigua fábrica de aspiradoras, convertida a la vez en hotel y patio de recreo, donde se puede dormir en antiguas caravanas y cabañas de madera. El patio del Hüttenpalast permite relajarse entre hierbas aromáticas, parras y verduras y en el café se puede tomar un desayuno ecológico, un almuerzo sin carne o pasteles caseros.

Sauvage

El primer paleo-restaurante de Berlín se halla en un antiguo burdel. En Sauvage se come como en el 10 000 a. C, sin cereales, queso o azúcar. Solo platos ecológicos a base de pescado, carne, huevo, hierbas aromáticas, semillas, aceites, fruta y verduras silvestres.

Berlin Burger International

En BBI (Pannierstrasse 5) el tamaño sí que importa, al menos en cuanto a hamburguesas se refiere. Las suyas son caseras, potentes, grandes y suculentas.

Ä

Para el estándar de Neukölin, este pub es un vejestorio. Ä (Weserstrasse 40) es un buen sitio para comer que ofrece diversas clases de entretenimiento, desde máquinas de pinball a DJ, música en directo o un culebrón mensual protagonizado por muñecos de peluche abandonados.

Sameheads

Ingeniosa mezcla de tienda-café-bar-club-sala de fiestas, el Sameheads (Richardstrasse 10) se dedica a vender moda bohemia de diseñadores emergentes, pero también incluye en su programación extravagantes noches de cine, un divertidísimo concurso de pub, cenas de tenedor libre y animadas fiestas.

Neuköliner Oper

No es la típica ópera a la que acude la flor y nata de la ciudad. La Neuköliner Oper (Karl-Marx-Strasse 131-133), ofrece un repertorio activamente antielitista que va desde el teatro musical inteligente a producciones originales e interpretaciones experimentales de obras clásicas.