Viajar por Serbia es seguro para quienes tomen las precauciones habituales, salvo en las zonas fronterizas, particularmente en la frontera sureste de Kosovo, donde persisten las tensiones entre serbios y albaneses. Se aconseja consultar la situación antes de intentar cruzarla, y pensárselo dos veces antes de llegar hasta allí en un vehículo con matrícula de Serbia.
En la región de los Balcanes Occidentales habitan dos tipos de víboras venenosas, aunque suelen evitar el contacto con los humanos. Si se sufre una mordedura, hay que dirigirse inmediatamente a un centro médico para tratarse con el antídoto.
Los automovilistas locales no tienen reparos en adelantar en esquinas ciegas mientras hablan por teléfono. Aunque hacer sonar la bocina es un pasatiempo regional, es mejor mantener la calma y respetar los límites de velocidad: la policía de tráfico (que a veces solicita sobornos) es omnipresente.
Se aconseja consultar la información actualizada sobre alertas y recomendaciones de viaje a Serbia en el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación del Gobierno de España.
Antes y durante el viaje recomendamos que cualquier información relacionada con seguridad, salud, trámites administrativos como la expedición de visados, etc. sea verificada con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país del viajero.