El extenso distrito de Near West Side incluye Greektown y el próspero West Loop, donde elegantes restaurantes, clubes y galerías se abren paso en medio de instalaciones cárnicas, y donde afamados chefs inauguran un local cada semana. En el cercano Pilsen, la cultura mexicana se mezcla con el underground de Chicago, dando lugar a vistosos murales, taquerías y cafés.
Se puede desayunar en Lou Mitchell’s, que tiene Milk Duds y está cerca del meollo, o en el Sweet Maple Cafe, que tiene pasteles y sémola, pero queda algo lejos. Si coincide con el último fin de semana del mes, se impone el Randolph Street Market.
Se va en tren hasta Pilsen para visitar el National Museum of Mexican Art, con exposiciones gratuitas, y pasear por 18th St, con curiosas tiendas, como Knee Deep Vintage y Comet Vintage, que comparten acera con Don Pedro Carnitas, La Catrina Cafe y otros locales mexicanos, además de pubs hipster como Dusek’s.
West Loop es una de las mejores zonas de Chicago para cenar, pero suele estar a tope. Se puede intentar reservar en Girl & the Goat o en Little Goat, o hacer cola en Avec. Se remata la jornada con una copa en RM Champagne Salon.