La estación de transición entre el frío y lluvioso invierno y el tórrido y soleado verano es idónea para realizar actividades al aire libre, desde visitar yacimientos arqueológicos hasta dormir bajo el cielo estrellado.
El fabuloso clima primaveral atrae al grueso de los turistas internacionales, así que conviene reservar con antelación.
Practicar excursionismo en el norte de Jordania durante el mes de marzo permite admirar plantas silvestres en fl
Fuera de los meses veraniegos, el tren expreso Estambul-Sofía tiene menos demanda (aunque los billetes pueden agotarse igualmente).
La temperatura exterior es más fresca de octubre a abril, época en la que conviene llevar ropa de abrigo para la cola del control de pasaportes que se lleva a cabo a la intemperie a altas horas de la noche.
Estambul es una ciudad ajetreada todo el año, pero el gentío disminuye cuando llega el otoño.