Bares neoyorkinos para esconderse
Beauty & Essex
Tras la fachada de una casa de empeños en el 146 de la calle Essex está este bar semiclandestino. Es un local nuevo, muy glamuroso, pero escondido detrás de una tienda de empeños que no lo es tanto. En el interior hay 30000 m2 de salones, con sofás y banquetas de piel, una acogedora iluminación ambarina y una escalera circular que lleva a otra zona de bar. Las chicas pueden pasar de largo el bar y visitar los tocadores, donde hay champán gratis.