Japón sufre periódicamente desastres naturales: terremotos, tsunamis, erupciones volcánicas, tifones y deslizamientos de tierras. Los modernos sistemas de prevención y las estrictas normas de construcción mitigan en gran medida el impacto (pero no son infalibles, como se vio con el terremoto y el devastador tsunami del 2011). La aplicación para móvil Safety Tips envía
alarmas meteorológicas, de tsunami y de actividad sísmica, y también ofrece algunas frases clave para poder pedir información en caso de emergencia.
Por lo demás, viajando por Japón se tiene la sensación de seguridad general. En todo caso, conviene mantener cierta prudencia y aplicar el mismo sentido común que en casa.
La policía japonesa tiene potestades extraordinarias. Los agentes pueden retener a un sospechoso hasta tres días sin mediar denuncia alguna. Pasado este tiempo, un fiscal puede ampliar la retención hasta 20 días más. Además, la policía japonesa decide si permite o no al sospechoso llamar a su embajada o abogado, aunque habría que negarse a cooperar hasta que no dejen hacer dicha llamada, en cuyo caso se recomienda que sea a la embajada.
La policía apenas habla inglés; hay que perseverar para que se cite a un tsūyakusha (intérprete). Por ley, la policía está obligada a facilitar uno antes de proceder a cualquier interrogatorio. Aunque se hable japonés, es mejor negarlo y ceñirse al idioma natal.
Téngase en cuenta que la ley exige llevar el pasaporte en todo momento (o, para estancias de más de 90 días, la tarjeta de residente). Aunque no es habitual que lo pidan, si la policía lo exige y no se lleva, podría acabarse en comisaría hasta que alguien vaya a buscarlo.
Japón aplica una política dura contra la posesión de narcóticos, con sentencias largas y multas aun cuando no se tengan antecedentes.
Se aconseja consultar la información actualizada sobre recomendaciones y alertas de viaje antes de viajar a Japón en el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.
Antes y durante el viaje recomendamos que cualquier información relacionada con seguridad, salud, trámites administrativos como la expedición de visados, etc. sea verificada con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país del viajero.