En Montenegro, la atención médica es buena y asequible y, para dolencias leves, los farmacéuticos dan consejos valiosos y venden medicamentos sin receta. También pueden aconsejar cuando sea necesaria atención más especializada e indicar dónde conseguirla. Los dentistas suelen ser buenos, pero no es mala idea hacerse una revisión dental antes de un viaje largo.
Planear un poco antes de salir de viaje evita problemas, sobre todo si se padece alguna enfermedad. Hay que ir al dentista antes de un viaje largo. Conviene llevar lentes de contacto y gafas de repuesto, y llevar anotada la graduación oftalmológica. Hay que llevar los medicamentos en sus envases originales etiquetados. También es buena idea llevar una carta del médico donde detalle las afecciones y medicamentos requeridos para ellas, incluidos los genéricos. Si se llevan jeringuillas, debe acompañarlas una carta del médico que explique que son necesarias.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que todos los viajeros estén vacunados contra difteria, tétanos, sarampión, paperas, rubeola, tosferina y polio, vayan donde vayan. Tam- bién es buena idea vacunarse contra la hepatitis A y B. Como la mayor parte de las vacunas no inmunizan hasta al menos dos semanas después de haber sido administradas, hay que vacunarse al menos seis semanas antes de salir de viaje.
La meningoencefalitis de garrapata se transmite por picaduras de garrapata y se cree que existe en zonas boscosas de Montenegro. Es una afección grave del cerebro y es aconsejable que se vacunen las personas que vayan a zonas de riesgo y no puedan evitar las picaduras de garrapata (como campistas y excursionistas).
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE UU recomienda una vacuna antirrábica para quienes vayan a hacer un viaje largo y para los profesionales que trabajen con animales, investigadores, veterinarios, o viajeros y aventureros que visiten zonas donde sean comunes los murciélagos, los carnívoros y otros mamíferos.
Hay que tener cuidado con los erizos de mar en las playas rocosas; si sus espinas se clavan en la piel, el aceite de oliva ayuda a sacarlas. Si no se extraen, pueden provocar una infección. Como precaución, hay que llevar calzado de goma al caminar por las rocas y tener cuidado al bañarse.
Para evitarlas, no hay que caminar descalzo ni meter la mano en agujeros o grietas. En la mitad de los casos, la serpiente no inyecta veneno. Si se sufre una mordedura de serpiente, no debe cundir el pánico. Hay que entablillar el miembro afectado (p. ej. con un palo) y colocar un vendaje firme, como si fuera un esguince. No hay que hacer un torniquete, ni cortar ni succionar la mordedura. Hay que buscar un médico lo antes posible para que administre un antídoto si es necesario.
Por regla general, el agua del grifo es potable en Montenegro pero puede haber problemas. P. ej., es aconsejable no beber el agua de Herceg Novi en mayo, ya que cierran y limpian las tuberías del pantano principal (en Croacia) y se abastecen de un pantano local. El agua embotellada es barata y fácil de encontrar.
Se recomienda una póliza de viaje (guardada en un recipiente hermético) que cubra robos, pérdidas y problemas médicos. Aunque no hay muchos problemas de robos, a veces los oportunistas se ceban con los automóviles de alquiler, y las carreteras de Montenegro no son las más seguras del mundo. Hay infinidad de pólizas para elegir; solo hay que comparar la letra pequeña y los precios.
Los ciudadanos de la UE están cubiertos en casi todos los casos por atención médica de urgencias salvo en las repatriaciones urgentes. Los ciudadanos de otros países deben averiguar si existe algún acuerdo recíproco de atención médica gratuita entre su país y Montenegro. Conviene contratar la póliza poniéndose en el peor caso, como un accidente que requiera volar de urgencia a casa. Es aconsejable averiguar antes si paga directamente la aseguradora o si reembolsan el dinero más tarde en caso de gastos de salud en el extranjero. Suele ser preferible la primera opción, sobre todo si se va con presupuesto ajustado.
Algunas pólizas excluyen especifícamente lo que denominan “actividades peligrosas” como submarinismo, paravelismo, parapente, barranquismo, rafting en aguas bravas, esquí e incluso excursionismo. Si se planea hacer cualquiera de ellas (muy probable en Montenegro), hay que asegurarse de que la póliza elegida dé cobertura completa e incluya ambulancias y evacuación médica de urgencia.
Si hay que reclamar al seguro, hay que conseguir y guardar la documentación relevante. Esto puede incluir una denuncia en caso de robo y facturas de los gastos médicos. Algunas pólizas exigen una llamada a cobro revertido a un centro en el país de origen donde se hace una valoración inmediata del problema ocurrido.
Antes y durante el viaje recomendamos que cualquier información relacionada con seguridad, salud, trámites administrativos como la expedición de visados, etc. sea verificada con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país del viajero.