Paisajes lacustres y torrentes de montaña, laderas cubiertas de viñedos, tranquilos bosques… Esta región seduce a los visitantes con su variedad de paisajes. En su centro, separadas por menos de 20 km, las poblaciones de Aix-les-Bains y Chambéry se complementan a la perfección. La ciudad-balneario de Aix-les-Bains está a orillas del Bourget, el lago natural más grande de Francia. Chambéry, con su centro medieval, ofrece opciones para los amantes de la historia y del patrimonio. Al este de estas dos urbes se alzan los Bauges, macizo de mediana altura con enormes praderas alpinas que en invierno se convierte en un paraíso para los esquiadores de fondo. Al oeste de Chambéry, a solo unas cuantas pedaladas, se extiende el lago de Aiguebelette, una delicia para bañarse.